Notas |
- Nació en San Miguel de Tucumán el 29 de enero de 1831, hijo de don Luis Posse Tejerina y de doña Isabel Bores. Su familia llevaba ya dos generaciones en el país y conformaban uno de los grupos económicos y políticos más expectables del Norte Argentino. Nacido durante los sangrientos años de nuestras guerras civiles, desde la niñez, cultivó un espíritu independiente, demostrando una gran inteligencia y determinación, desde pequeño fue un autodidacta, quién aprovechaba cada volumen (sobre temas diversos), de las pocas bibliotecas que por entonces tenía Tucumán, en su mayoría privadas.
Don Filemón Posse fue el primero en quebrar la tradición mercantil de su familia, prefiriendo los claustros universitarios a los avatares del comercio y de la industria.
Realizó sus estudios secundarios en el histórico Colegio Nacional de Monserrat, y los superiores en la Universidad de Córdoba, donde recibió el grado de Doctor en Leyes el 15 de diciembre de 1852.
Desde 1853 a 1855, practicó en la Academia Teórica Práctica de Buenos Aires, y en el acreditado estudio del doctor Marcelino Ugarte.
En el año 1856, la familia Posse de Tucumán trabajó la designación del joven doctor Filemón, como diputado al Congreso de Paraná, saliendo electo.
Se incorporó, el 16 de mayo; tenía por entonces 25 años, lo que lo convertía en el menor de los legisladores. Formó parte de los llamados "liberales", con Rawson, Laspiur, Bazán, Próspero García, Frías, entre otros. Habló por primera vez en la sesión del 26 de junio, votando en favor del proyecto de ley que prohibía la importación de mercaderías que no entrasen directamente por los puertos de la Confederación.
En 1858, durante la discusión del proyecto sobre Justicia Federal, que duró ocho días, tuvo una de sus más destacadas participaciones.
Con el doctor Daniel Aráoz propuso autorizar al Poder Ejecutivo a hacer construir un puente sobre el río Pasaje, con su respectiva calzada, en el intercurso del camino Tucumán y Salta.
Poco después, presentaba otro importante proyecto sobre tierras públicas. Estuvo en la banca hasta 1860. Ese año se trasladó a Córdoba, donde instaló un estudio que gozó de merecida fama.
En la ciudad mediterránea desempeñó los cargos de Censor de la Academia de Práctica Forense, y Comisionado de Gobierno de Tucumán y Córdoba ante el Estado Nacional, para la gestión de varios negocios.
En ese año se lo nombrará también Ministro General de Gobierno y diputado suplente al Congreso de Paraná, por la provincia de Tucumán.
En 1861, fue elegido diputado a la Legislatura Cordobesa (banca que desempeñó reiteradamente) y nuevamente Ministro de Gobierno. Por entonces, ya Filemón Posse gozaba de prestigio hondamente cimentado en toda la República.
En 1862, el gobernador Justiniano Posse-quien le tenía gran afecto y confianza-lo designó Ministro de Hacienda. Le tocó desempeñar cartera en los difíciles momentos de aquella gestión que culminaría con el derrocamiento y posterior asesinato del gobernador.
Debido a estos graves disturbios, se trasladó, en compañía del doctor Jerónimo Cortés, a la ciudad de Tucumán, donde abrieron un importante estudio jurídico.
En 1863, fue designado Defensor de Pobres y Menores, y luego Vocal del Superior Tribunal de Justicia.
En 1864, se lo nombró Juez Federal en Catamarca. Allí impartiría gratuitamente las Cátedras de Derecho Penal, Constitucional, Procedimientos e Historia Argentina, en un colegio sostenido por el Gobierno Provincial y que de esa manera tomó fama de ser de los mejores que se conocía en las provincias del interior.
En 1866, fue elegido diputado por Tucumán a la Convención de Santa Fe que reformó la Constitución Nacional.
Luego de los sucesos de 1867,que terminaron con el derrocamiento de su primo el Gobernador Wenceslao Posse, y sufriendo la persecución de los mitristas vencedores, decidió regresar a Córdoba. Allí fue designado Presidente de la Academia de Práctica Forense y miembro del Consejo Municipal.
En 1869, fue elegido Juez de Comercio y Municipal, cargos que desempeñó con probidad reconocida.
Luego abrió su propio bufete, donde ejerció la profesión de abogado, y adquirió tal renombre, que su estudio fue el más acreditado y de mayor clientela en la ciudad de Córdoba.
Fue en ese período que patrocinó, como abogado, lo que en la época se consideraba el asunto más ruidoso que se hubiera ventilado en las provincias, por su importancia jurídica y por la notoriedad del demandado. Un señor De Andreis, pobre, sin ningún recurso, tenía que iniciar un pleito contra el conocido y poderoso empresario de ferrocarriles, José Télfener. Desesperaba de encontrar en Córdoba un abogado que lo patrocinara, hasta que el doctor Posse aceptó su caso. El pleito duró varios años, durante los cuales Télfener contrató a los más prestigiosos letrados del país. Pero fue en vano: Posse ganó el pelito y De Andreis ganó una fortuna. Ejerció el derecho hasta el año 1876, en el que ingresó de lleno en la cosa pública.
Don Filemón se casó tres veces. En primeras nupcias, con doña Natalia González Moyano. Al enviudar, reincidió con doña Concepción Suárez Peña, de la que también enviudó, para casarse en terceras nupcias con doña Inés Suárez Peña hermana de la anterior.
En 1876, el ya muy prestigioso doctor Posse fue nombrado Rector del Colegio Nacional de Córdoba, cargo que desempeñó hasta fines de 1881. Fue el primer rector secular que tuvo ese Colegio.
Por la misma época, fue también miembro del Consejo Superior de la Universidad y Decano de la Facultad de Humanidades.
Durante la presidencia de su pariente, el General Julio A. Roca en 1882, fue nombrado vocal de la Cámara de Apelaciones en lo Civil de la Capital Federal, cargo que desempeñó hasta 1881. Un año antes se había desempeñado como "comisionado confidencial" del gobierno nacional en Santiago del Estero.
En 1884, fue elegido diputado al Congreso Nacional por la provincia de Córdoba. Se distinguió por su oratoria sobria, pero llena de intención, profunda y sólida en los argumentos.
Presentó diversos proyectos de importancia, que dieron motivo a debates memorables. Su ideario liberal le determinó que tuviera, por adversarios en doctrina a Pedro Goyena y José Manuel Estrada.
Formó parte, al mismo tiempo, de las comisiones de Códigos, Obras Públicas y Hacienda, concurriendo activa y eficazmente a la reforma del Código Penal, Ley Orgánica de los Tribunales, Código de Minas y de Procedimientos en lo Criminal.
En 1885, fue nombrado abogado de la provincia de Córdoba ante la Suprema Corte Federal.
El Presidente Miguel Juárez Celman, en vista de sus relevantes dotes de jurista y educador, confió a Posse el honroso cargo de Ministro de Justicia, Culto e Instrucción Pública de la Nación, en 1886.
Desde el principio de su gestión, resistieron duramente a este liberal aguerrido los representantes de la Unión Católica. Si bien Posse se confesaba creyente, bien pronto demostraría que no correspondía plenamente a la ortodoxia católica.
En efecto, el 22 de Setiembre de 1887, refrendó el proyecto del Ejecutivo que modificaba las disposiciones del Título Primero, Sección Segunda, Libro Primero del Código Civil, sobre el matrimonio. Así, la "Ley de matrimonio civil" fue proyectada por Posse, quien la defendió ante el Congreso de la Nación en "un admirable torneo oratorio que duró varios días, durante los cuales se marcó una de las más gloriosas jornadas del Parlamento Argentino, por la calidad de los contendientes, que acusaron la profundidad de sus talentos y el brillo de sus palabras."
"Se destacó la preparación Jurídica del doctor Posse, demostrada en los fundamentos con los cuales defendió la calidad del vínculo matrimonial, como contrato que debe ser sometido al imperio del código civil?. En efecto, el proyecto establecía como único matrimonio legal el inscripto ante el Registro Civil, reglado según las formalidades de la ley. El principal argumento utilizado contra el Gobierno era el de que no podía obligarse a los católicos a casarse civilmente; que quitado el fundamento religioso y moral al matrimonio, sería difícil mantener su indisolubilidad, y que el proyecto era "diametralmente opuesto a la Doctrina Católica". y produciría por tanto una honda perturbación en las conciencias, con resultados funestos para la sociedad argentina. El debate tuvo repercusión Nacional ;bandos enfrentados en la disputa llegaron a enfrentarse en sangrientos encuentros en las calles de las principales ciudades Argentinas.
Finalmente, el proyecto fue aprobado en general por 16 votos contra 9 y enviado, luego de su aprobación en particular, a la Cámara de Diputados, que lo aprobó.
El 12 de noviembre, el Poder Ejecutivo Nacional promulgaba la ley de Matrimonio Civil número 2393, que fue conocida como "Ley Posse" y comenzó a regir el 1ro de abril de 1889.
El cancionero popular de Tucumán nos recuerda aquellos días: "Entró el primero de Abril/del fatal ochenta y nueve/que a todo el mundo conmueve./El matrimonio civil". "Nuestro ilustre presidente/ El y el congreso Argentino/siendo hombres de tanto tino/erraron completamente." "Se verán avergonzados/ cuando la cuenta les pidan/ a esos grandes magistrados/ en la presencia divina".
Tradiciones familiares recuerdan que esta ley le suscitó la excomunión de la iglesia Católica.
A pesar de los desaciertos de Juárez Celman en su gestión presidencial (durante la cual fue derrocado violentamente el Gobernador tucumano don Juan Posse), la tarea ministerial del doctor Posse fue verdaderamente trascendente y digna de ser reconocida: dio un impulso extraordinario a la enseñanza en general. Organizó la instrucción desde el jardín de infantes hasta los estudios universitarios, dictando planes para las escuelas de aplicación, modificando los de las escuelas normales, y colegios nacionales. Dotó de edificios a la facultad de medicina, casa de maternidad, anfiteatros, escuelas, etc. Ello aparte de muchos proyectos que quedaron en las carpetas del ministerio, sobre creaciones de bibliotecas nacionales, casa de justicia, etc.
Concurrió, en esa misma época, a las reformas del Código de Comercio y modificó la Ley de Territorios Nacionales.
Dictó, además, los datos e instrucciones para el delegado del Gobierno Nacional ante el Congreso Internacional Penitenciario de San Petesburgo.
Su administración dotó, a la república de 14 Escuelas Normales. Puede decirse que, de un extremo al otro del país, no hay una sola provincia en la cual, durante los tres años del ministerio del doctor Posse, no se haya levantado algún edificio nuevo, o refaccionado y ensanchado los ya existentes.
Refrendó con su firma la creación de la Escuela Nacional de Comercio "Carlos Pellegrini".
En mayo de 1889, representó al Poder Ejecutivo Nacional en las ceremonias realizadas con motivo del traslado de los restos del doctor Juan Bautista de Alberdi al país.
Luego de dejar el Ministerio, fue nombrado abogado de Córdoba ante la Suprema Corte Federal, y miembro de la comisión de reformas a los estatutos de la Bolsa de Comercio de la Capital. Posteriormente, fue presidente de la Cámara de Apelaciones en lo Comercial, Criminal, y Correccional cargo que desempeñó hasta su fallecimiento.
Escribió y publicó numerosos trabajos jurídicos, entre los que se destaca el proyecto de reformas a la Constitución de la Provincia de Córdoba en 1870, y dejó inédito un estudio crítico sobre el Código Civil.
Al presentir su muerte, luego de reconciliarse con la Iglesia recibió la extremaunción y se despidió con toda entereza de su familia.
Falleció el 16 de febrero de 1893, recibiendo honores fúnebres oficiales del Ejecutivo Nacional y de la Cámara de Justicia de la Capital.
El doctor Filemón Posse es uno de los grandes olvidados no sólo de la historia nacional, sino también de las provincias de Tucumán y Córdoba, las que, en mérito a sus trascendentes servicios, le deben-al menos-una calle que recuerde su nombre a
la posteridad.
José María Posse
Fuente: Los Posse, El Espíritu de un Clan.
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