Notas |
- CATALINA DE VERA Y GUZMAN usó el nombre y primer apellido de su bisabuela materna Catalina de Vera y, en segundo lugar el apellido ilustre de su bisabuela paterna Brianda de Guzmán, la cual - según los testigos de una probanza levantada en Jerez de la Frontera en 1534 - se vinculaba por parentesco con la Casa Ducal de Medina Sidonia. Nació nuestra Catalina en el Paraguay, y de niña vivió con sus padres y hermanos en Ciudad Real, donde el autor de sus días, Riquelme de Guzmán, era Teniente de Gobernador, hasta que Díaz Melgarejo lo metiera preso en una mazmorra. Casó la señora, a su debido tiempo, con el Capitán Gerónimo López de Alanis, antiguo vecino de Zaragoza en España. Acá en el nuevo mundo, se desempeñó como Procurador en el Guayrá paraguayo. En 1600 es el encargado de llevar unas cartas que su cuñado Ruy Díaz de Guzmán - a la sazón vecino de Jerez, en el Paraguay - destinaba al Licenciado Cepeda y a Juan Torres de Vera y Aragón, ambos residentes en Charcas, con motivo de tramitarse allá la Información de servicios de aquel conquistador, futuro cronista de La Argentina. Posteriormente "Jerónimo de Alanis, vecino de Jerez" (la Jerez paraguaya) se avecindó con su familia en Buenos Aires, donde, el 13-I-1610, le compró a Melchor Casco de Mendoza, por ante Juan Montenegro, "una cuadra en la traza de la ciudad", que lindaba, "por la parte de arriba del Riachuelo de los Navíos", con cuadra de Víctor Casco, padre del vendedor. Poco después moría don Gerónimo. Su viuda le sobrevivió con casa propia en Buenos Aires, edificada en un solar situado frente a las hoy calles Bolívar y Alsina; cuyo terreno fue originariamente adjudicado por Garay a Juan Fernández Enciso. En 1615 "Catalina de Guzmán" figura en la lista de "permisiones", entre los vecinos porteños calificados como "últimos pobladores". El 8-VI-1617, la aludida señora le vendió a Mateo Monserrate, por 60 pesos, "una chácara e tierras con una casa poblada en ellas, que he y tengo en términos desta ciudad, de la otra parte del Riachuelo de los Navíos, más de media legua desta ciudad, que son 350 varas de frente, o lo que pareciere, y el largo que tienen las demás; y linda por una parte con tierras del dicho comprador, y por la otra con las que pareciere por los títulos". (Lindaba con tierras que fueron de Pedro Bernal). Y en la colecta que los vecinos bonaerenses hicieron en 1618, para pagarle al carpintero Ramírez sus trabajos en la iglesia mayor, mi antepasada Catalina contribuyó con 2 pesos de la moneda fuerte de entonces.
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