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- DOMINGO DÍAZ DE LORIA - mi ascendiente, al que presumo hijo natural de su homónimo antes nombrado - llamóse siempre de esa manera, aunque su madre se apellidaba Rodríguez, como lo expresa una escritura suscripta por sus hijos veintisiete años después de su muerte, y a la que he de referirme más adelante. En 1726 contrajo matrimonio con Felipa de Urmendia, o Hurmendia, Gurmendia o Gurmendi, cual aparece escrito indistintamente. Doña Felipa era propia hermana de Pedro López de Urmendia y media hermana de Antonia de la Cantolla, según consta en otra escritura que oportunamente citaré.
El 17-VII-1752, ante el Escribano Francisco López Zevallos y los testigos llamados y rogados , Presbítero Miguel Díaz Zambrano, el Capitán Juan Antonio Vélez y Francisco León de Refojos, mi 5to abuelo dijo; "En el nombre de Dios todo Poderoso y de la siempre Virgen María Señora nuestra, concebida en Gracia sin pecado original. Amén. Sea notorio como yo Domingo Días de Loria ... estando enfermo de accidente grave y en mi cumplida memoria y juicio y entendimiento natural... Digo que por cuanto yo tengo comunicada mi voluntad con el Capitán don Dionisio Chaves, y de él he tenido y tengo mucha satisfacción ... confiando en su celo y cuidado ... otorgo por la presente mi poder cumplido, como se requiere, al dicho Capitán ... para que ... ordene mi testamento ... Mando que mi cuerpo sea sepultado en la Santa Iglesia Matriz o donde dispusiera mi Albacea, como también amortajado con el hábito que le pareciere en atención a mi notoria pobreza. Y nombro por mi Albacea al dicho don Dionisio Chaves ... Declaro que debo al Tesorero don Toribio del Nogal y Nicola (marido de doña Valeriana de Ibarguren Castañares) un mil pesos ... y para la liquidación de las cuentas que teníamos ... nombré por mi parte al Maestre de Campo Don Diego de Isunza ... Declaro que con dicho Don Toribio hicimos trato de que asistiéndole en la chacra, partiríamos de los multiplicios de las vacas y ovejas, y con motivo de una accidental quemazón que vino del campo, y se quemó la casa de dicha chacra, me echó de ella y, sin darme nada, herró y se cogió dichos multiplicios ... Instituyo y nombro por mis herederos a Miguel, Magdalena, Joseph, Martín, Francisca y Jacinta, mis hijos legítimos y de Doña Phelipa Hurmendia, difunta, mi legítima mujer, para que los hayan y gocen igualmente con la bendición de Dios y la mía ...". A ruego del otorgante firmó la escritura el clérigo Miguel Díaz Zambrano.
por Carlos F. Ibarguren
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